Estar al otro lado del mundo y sentir realmente lo pequeño que eres es muy fuerte. Si antes ya pensabas que estar del otro lado te hacía intocable, pues estabas muy equivocado. Las cosas pasan ahora y siempre, pero cuando volcamos nuestra atención a los hechos, a la historia y vemos en que nos estamos convirtiendo como humanidad, la vida agobia. Es en estos momentos cuando te das cuenta que la vida no es tuya. La vida depende de tantos factores y solo podemos limitarnos a vivirla lo mejor que podamos. ¿ De qué nos sirve estar en este mundo solamente viviendo para otros? Las sociedades y los gobernantes se han encargado de hacernos meros instrumentos, y si llega el momento de morir...qué crudeza darse cuenta que no hemos vivido. Es por esta razón que siento que no podemos hacer caso omiso a lo que sucede en el mundo. Vengo de un país largo y ancho, y aún así vivimos en carne propia la violencia. Esta vorágine de crueldad sucede en todas partes y todos somos hermanos de un mismo planeta, sin embargo nos han hecho creer toda la vida que somos muy diferentes. Tal vez nuestros idiomas y circunstancias nos hacen ver diferentes, pero todos amamos, reímos, bailamos y sentimos lo mismo. Más que los adultos, siento que hemos sido demasiado injustos con la infancia. Cuántos niños y niñas del mundo sufren día a día con la violencia que adultos sin corazón imponen solamente por la avaricia y la codicia de lo que tiene el otro. Esos niños formarán las siguientes generaciones, y ya son generaciones dañadas, más que las que nos tocó vivir a nosotros. Como explicarle a esos niños las razones del por qué los seres humanos se destruyen en pos de líderes que de líderes no tienen nada, que son meros títeres del poder económico. La guerra del petróleo es un absurdo. Cuando ves las razones te das cuenta que es un completo absurdo. Las vidas humanas valen mucho más que el petróleo, pero que más da, para los gobiernos somos números...otros vendrán y serán instrumentos otra vez...aquellos niños a los que el odio los haya dominado y los haya transformado en seres que ya no puedan sentir...
